Fundada en 1997 en la provincia de Mendoza, Bodega Doña Paula, se estableció sobre la base de una visión innovadora, que supo reconocer el potencial de Argentina como productor de vinos de clase mundial. Con una filosofía arraigada en la expresión auténtica del terroir argentino, la bodega sostiene su vigencia como un emblema de calidad, pero también de firme compromiso con la sostenibilidad en la industria vitivinícola.
En Finca Alluvia, Gualtallary, nace Doña Paula Riesling. Está plantado sobre suelos arenosos con piedras aluviales y calcáreas, el clima presenta días cálidos y noches frescas, con una amplitud térmica de 13° C.
En cuanto a la vinificación se fermenta a bajas temperaturas, en tanques de acero inoxidable.
Te vas a encontrar un vino que en vista posee un color amarillo pálido, en nariz tiene expresivos aromas a flores blancas, como jazmín, y notas cítricas. En boca es fresco, mineral y con buena acidez. Su carácter complejo y delicado lo hace muy atractivo.
